En la pieza, Kobe tiene su mano sobre el hombro de Gigi mientras comparten una mirada calida.
Siguio adelante, cargando cada pieza individualmente, porque sabia que eso era lo que Kobe le habria aconsejado.
Era un [intelectual], hablaba varios idiomas, era un avido lector.
Todos los pasajeros, incluido el piloto, fallecieron en el accidente.
Para Medina, fue una experiencia conmovedora ver el efecto que su creacion tuvo en los demas.
Hoy muchos padres lloraron en mis brazos, dijo.
El escultor Dan Medina subio la escultura de 150 libras (72.5 kg) por una colina empinada.